24.10.07

Green Thoughts

Desde hace dos meses, disfruto de una vida en verde.

Como si mis gafas tuviesen cristales de botella de heineken.

Sólo logro ver prados, higueras, musgo, brotecitos de brócoli, campos de golf, limas, cruces luminosas que anuncian farmacias, hojas de yerbabuena, cestos de manzanas ácidas y demás cosillas del color de las aceitunas.

Desde que este niño ha envenenado mis pensamientos, el paraíso natural me llama desde lejos, como una sirena verde sobre una roca verde...

17.10.07

La Desestructuración

Me he cortado el pelo, desestructurado, a mechones, raro, como un trasquilado ovejil.

Pago la seguridad social, todos los meses, cada trimestre. Ando todo el día pagando y además me da vergüenza cobrarle a mis pacientes.

La nevera de mi casa tiene cosas raras, kéfir, cervezas, tomates rojísimos, agua mineral para las visitas, uvas, cogollos de lechuga, solomillos de ternera.

Últimamente me parece que mi vida no es mi vida, que mi nevera no me pertenece, que pago más que cobro, que mi pelo está peor que antes (pero extrañamente me mola).

Estos días no parezco yo y eso me gusta bastante.

16.10.07

Life Is Only One

and I want to waste it, with you...

10.10.07

Las cosas que me gustan de mi casa


1. Poner la lavadora, tender la ropa al sol y que el olor a suavizante se cuele hasta mi dormitorio.
2. Abrir la puerta de la entrada y ver a mi bonsai gigante.
3. Poder reirme a carcajadas, viendo Muchachada Nui y no despertar a nadie.
4. El cuadro de flores esponjosas, que pintó mi abuela.
5. Los dos brezos, en sus macetitas blancas.
6. Tomarme una cerveza en el sofá, mientras veo las noticias de la noche.
7. Caminar descalza, por ese suelo que nunca está frío.
8. El olor a mar, que inunda la casa entera al abrir las ventanas de noche.
9. La cama grande en la que puedo estirarme y dar vueltas.
10. El incienso de canela que se va quemando, sobre la mesa mexicana.

8.10.07

5 de octubre de 2007

Jamás olvidaré este fin de semana...

1.10.07

No tengo nada que decir

Cuando estoy bien, no se me ocurre nada sobre lo que escribir.

Las palabras se me escurren en el cerebro, como si estuviesen hechas de mantequilla caliente.

Ando todo el día con canciones e imágenes psicodélicas en la cabeza. Lucy in The Sky with Diamonds, you know...

Cuando estoy bien, sólo me fijo en los pequeños detalles, como los periquitos verdes y salvajes, que comen dátiles de la palmera de enfrente de mi casa.