30.7.07

It´s hot outside

Hace muchísimo calor. Casi no hay escapatoria.

No me sirven ni el aire acondicionado, ni el té frío, ni las cuatro duchas diarias, ni caminar desnuda por casa.

Sólo conseguí refrescarme el otro día, en Pedregalejo, compartiendo unas cervezas heladas que venían en un cubo con hielo y muy buena compañía...

16.7.07

Mark Murphy y sus trompetistas

El 4 de julio, estuve en el Club Soda de Móntreal. La sala es perfecta, pequeña, mal iluminada, con mesitas para tomarte una copa mientras escuchas un concierto.

Yo iba a oir en directo a Mark Murphy, que llegó puntual, sonrío con esa cara de Al Pacino operadísimo, nos enseñó su camisa imposible, de raso, a rayas multicolores y presentó a su grupo de pasadilla, demostrando que el importante era él (il divo divino).

A los cinco minutos, dejé de prestarle atención al cantante. El trompetista, Brian Newman, llevaba todo el peso de la actuación. Es joven e iba bien vestido, a la antigua, con un traje cortado a medida, camisa, corbata y tirantes. También tiene un aire famoso (se parece a Adrien Brody en el Pianista).

Sólo estaba él, iluminado a la izquierda, con su trompeta lanzando destellos. Brillaba y yo hacía años que no disfrutaba tanto. La música en mi cabeza, muriendóme de placer y de melancolía porque cada canción me acercaba más al final de aquella música ardiente...

10.7.07

rêve doux

Hay alguien en mi vida, que me ha acompañado siempre. Está lejos y estuvimos un tiempo perdidos, pero aún así conseguía hacerme ecos desde la distancia.

Es la única persona a la que siempre le conté todo. Porque me escuchaba sin prisas, sin juicios, sin espacio entre los dos, como si estuviese dentro en vez de enfrente.

Aparece de nuevo y todo vuelve a ser onírico y dulce. Consigue emocionarme otra vez, con sus palabras directas que me tocan algo dentro. Y vuelve a apetecerme hablar de mi, de mis dolores y de mis triunfos.

Ya no quiero cerrar mis heridas sola, quiero que él me las cure, como hacía antes. Los dos frente a una ventana, las partículas de polvo flotando brillantes en el aire, la música rara de David Bowie sonando desde la otra habitación y el tiempo parado, como debe ser.

3.7.07

Canadien

Estoy en Canadà. No quiero volver a Espagna.

Los colores de este paìs me tienen enamorada.

Hasta las bocas de riego son bonitas.

Me he comprado libros de fotografìa, el cartel del festival de jazz y un comic con la vida de Django Reinhardt (con dos CDs incluidos).

Anoche vimos a Cèsaria Èvora y me cantò mi canciòn favorita (Saudade), al salir a la Place des Arts un chico me diò su tarjeta para que le llamase para salir.

Este paìs es muy chulo...