
* Siempre me mancho de pasta de dientes. Resulta que en el botecito, es transparente y cuando me miro al espejo despues de enjuagarme sigue siendo traslúcida, pero se conoce que el producto va secándose y cuando salgo a la calle llevo manchas blancas pegadas en las comisuras (joe, qué asco!) y en los dedos.
* Tardo, aproximadamente, seis horas en los simples gestos de desayunar, recoger mi casa, ducharme y vestirme.
* No me gusta el teléfono.
* No uso el secador de pelo y en consecuencia, siempre voy despeluchada.
* Odio los zapatos y nunca me he puesto tacones.
* Todavía no he adivinado qué ropa me queda bien y siempre voy hecha un desastre, a pesar de tener un cuerpo diseñado para el pecado.
* Me dan coraje las farmacias llenas de cremas anticelulíticas, descorchar botellas de vino, acostarme en sábanas sucias, los abrefácil (quién diseña esas cosas?), limpiar el polvo y tener miles de pequeñas tareas pendientes como arreglar la terraza de mi casa que está hecha un asco, pintar el zócalo del techo, colgar la mosquitera encima de mi cama, etc, etc.
* Nunca plancho.
* Canto, a pesar de que lo hago fatal.
* Y fumo, últimamente más de la cuenta.
3 comentarios:
No hay belleza en la perfección, resulta antinatural y artificial. Esos pequeños detalles que adornan tu personalidad sólo contribuyen a que te quiera mas. ( si es posible... )
Nada grave...
¿Lei noche de bodas? ¿Estare invitado? (a la boda, por supuesto)
Yo tambien me mancho con pasta de dientes, pero en mi caso siempre son los pies. No me preguntes como es que sucede eso.
Jo, C., siempre me dejas sin palabras. Si es posible, si es posible :)
Hola J., cuando haya boda claro que estás invitado. Empieza a ahorrar para el billete, la estancia te la pago yo enterita. Me haría mucha ilusión que estuvieses :)
Besillos
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